10 remedios caseros para la mala digestión
Contenido
- 1. Té de menta
- 2. Té de arándano
- 3. Té Veronica
- 4. Té de hinojo
- 5. jugo de manzana
- 6. Té de cálamo
- 7. Jugo de piña con papaya
- 8. Jugo de limón
- 9. Té de hierba de limón
- 10. Té de cúrcuma
Algunos de los mejores remedios caseros para la mala digestión son los tés de menta, arándano y verónica, pero los jugos de limón y manzana también pueden ser muy útiles porque facilitan la digestión y alivian las molestias.
Además, tomar carbón puede ayudar al organismo a deshacerse de los gases y toxinas acumulados, y puede ser una buena solución para quienes también sufren de eructos e hinchazón constantes.
Entonces, algunos tés excelentes para combatir la mala digestión son:
1. Té de menta
El té de menta actúa como un estimulante gástrico natural, lo que ayuda a reducir la sensación de estómago lleno y a aliviar los síntomas de mala digestión.
Ingredientes
- 1 cucharadita de hojas de menta frescas o secas;
- 1 taza de agua hirviendo.
Modo de preparo
Agrega la menta en una taza de agua hirviendo y deja reposar por 5 minutos, luego cuela y bebe.
2. Té de arándano
El té de boldo estimula el sistema digestivo y tiene propiedades que ayudan a desintoxicar el organismo, aliviando la mala digestión y los problemas intestinales.
Ingredientes
- 1 cucharada de hojas de arándano;
- 1 litro de agua.
Modo de preparo
Colocar las hojas de arándano en una olla con 1 litro de agua, y dejar hervir unos minutos, después de enfriar, colar y beber.
Si la mala digestión es frecuente, se recomienda consumir té antes y después de las comidas.
3. Té Veronica
El té de Verónica tiene propiedades digestivas que ayudan a la digestión, además de reducir las molestias causadas por la comida en el estómago.
Ingredientes
- 500 ml de agua;
- 15 gramos de hojas de verónica.
Modo de preparo
Ponga los ingredientes a hervir durante 10 minutos en una olla. Cubra y deje enfriar, luego cuele. Debe beber una taza antes de las comidas principales y hasta de 3 a 4 tazas al día.
4. Té de hinojo
Las propiedades del té de hinojo ayudan a combatir la mala digestión, porque reducen la producción de gases estomacales que provocan la sensación de malestar.
Ingredientes
- 1 cucharadita de semillas de hinojo;
- 1 taza de agua hirviendo.
Modo de preparo
Agrega las semillas en la taza de agua hirviendo y espera unos minutos. Cuando esté caliente, cuele y beba a continuación.
5. jugo de manzana
Otro buen remedio casero para la digestión lenta y los gases es beber jugo de manzana preparado con agua con gas, ya que la manzana tiene una sustancia llamada pectina, que en contacto con el agua forma una especie de gel alrededor del estómago, aliviando así las molestias de una mala digestión.
Ingredientes
- 2 manzanas;
- 50 ml de agua con gas.
Modo de preparo
Batir 2 manzanas en la batidora, sin añadir agua, luego colar y mezclar los 50 ml de agua con gas.
Este jugo es muy eficaz para ayudar a la digestión, especialmente de alimentos ricos en grasas o picantes. Sin embargo, si los síntomas de mala digestión son frecuentes, se recomienda consultar a un gastroenterólogo para comprobar la salud del sistema digestivo.
6. Té de cálamo
El cálamo es una planta medicinal muy indicada para casos de mala digestión, eructos, flatulencias, pérdida de apetito y sensación de hinchazón en el estómago, por su acción calmante y digestiva.
Ingredientes
- 2 cucharadas de té de cálamo;
- 1 litro de agua.
Modo de preparo
Colocar las 2 cucharadas de cálamo en una cacerola con 1 litro de agua, y dejar al fuego hasta que hierva el agua, pasado ese tiempo retirar del fuego y dejar reposar tapado durante 10 minutos. Colar y listo para consumir.
7. Jugo de piña con papaya
El jugo de piña con papaya es un buen remedio casero para la mala digestión porque estas frutas tienen propiedades que facilitan la digestión. La piña por ser rica en bromelina, enzima que mejora el funcionamiento del aparato digestivo, y la papaya, por tener una sustancia llamada papaína, que estimula las deposiciones facilitando la expulsión de las heces.
Ingredientes
- 3 rodajas de piña;
- 2 rodajas de papaya;
- 1 vaso de agua;
- 1 cucharada de levadura de cerveza.
Modo de preparo
Pon todos los ingredientes en una licuadora y bate hasta que se forme una mezcla homogénea, cuela y bebe inmediatamente.
8. Jugo de limón
El jugo de limón se puede utilizar como remedio casero para la mala digestión, ya que actúa como un limpiador suave para el estómago y el intestino, disminuyendo las molestias gástricas.
Ingredientes
- Medio limón;
- 200 ml de agua;
- Media cucharada de miel.
Modo de preparo
Agrega todos los ingredientes en una licuadora y mezcla bien, luego el jugo está listo para beber.
Para combatir la indigestión, también es importante masticar bien los alimentos, no comer demasiado rápido ni beber demasiado líquido durante las comidas.
9. Té de hierba de limón
La propiedad antiespasmódica de la hierba de limón previene las contracciones del estómago, que empeoran la mala digestión, además de tener una función calmante y analgésica, que puede aliviar las molestias en pocos minutos.
Ingredientes
- 1 cucharadita de hojas de limoncillo picadas;
- 1 taza de agua.
Modo de preparo
Pon los ingredientes en una olla y deja hervir unos minutos. Luego debes filtrar y beber el té inmediatamente después de su preparación, sin agregar azúcar.
Se recomienda tomar pequeñas cantidades de este té cada 15 o 20 minutos, evitando el consumo de cualquier otro alimento hasta que hayan desaparecido los síntomas de mala digestión.
El té de hierba de limón no debe tomarse durante el embarazo porque puede dañar al bebé. Un buen remedio casero para la mala digestión en el embarazo es comer una manzana o una pera, no existen contraindicaciones para estas frutas.
10. Té de cúrcuma
La cúrcuma es un dolor de estómago, que favorece la digestión gástrica y es un excelente estimulante de las funciones digestivas intestinales y por tanto puede ayudar a reducir los síntomas de mala digestión.
Ingredientes
- 1,5 g de cúrcuma;
- 150ml de agua.
Modo de preparo
La cúrcuma debe llevarse al fuego para que hierva con el agua, ya que es a través de este proceso llamado decocción que se extraen sus propiedades medicinales. Después de hervir, el té debe filtrarse y consumirse de 2 a 3 veces al día.