Principales síntomas del VIH en el bebé
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Los síntomas del VIH en el bebé son más frecuentes en los hijos de madres con el virus del VIH, especialmente cuando no realizan el tratamiento correctamente durante el embarazo.
Los síntomas son difíciles de percibir, pero la fiebre persistente, las infecciones frecuentes y el retraso en el desarrollo y el crecimiento pueden ser indicativos de la presencia del virus del VIH en el bebé.
Síntomas principales
Los síntomas del VIH en el bebé son difíciles de identificar, sin embargo, puede ser indicativo de la presencia del virus del VIH en el bebé:
- Problemas respiratorios recurrentes, como sinusitis;
- Lenguas hinchadas en diferentes partes del cuerpo;
- Infecciones de la boca, como aftas o aftas bucales;
- Retraso en el desarrollo y crecimiento;
- Diarrea frecuente;
- Fiebre persistente;
- Infecciones graves, como neumonía o meningitis.
Los síntomas de la presencia del VIH en el torrente sanguíneo del bebé aparecen con mayor frecuencia alrededor de los 4 meses de edad, pero pueden tardar hasta 6 años en aparecer y el tratamiento debe realizarse según las indicaciones del pediatra.
Tratamiento del VIH para bebés
El tratamiento del VIH en el bebé se realiza de acuerdo con la orientación de un infectólogo o por el pediatra, y generalmente está indicado el uso de medicamentos antivirales en forma de jarabe, ya que a esta edad el bebé no puede tragar pastillas.
El tratamiento generalmente se inicia tan pronto como aparecen los síntomas, poco después de que se confirma el diagnóstico o cuando el niño tiene más de 1 año y tiene un sistema inmunológico debilitado. Según la respuesta del bebé al tratamiento, el médico puede realizar algunos cambios en la estrategia terapéutica según la evolución del bebé.
Además, durante el tratamiento, se recomienda que se utilicen fórmulas de leche en polvo para ayudar a fortalecer el sistema inmunológico, seguir el plan de vacunación y evitar que el bebé entre en contacto con niños con varicela o neumonía, por ejemplo, porque existe la posibilidad de desarrollar la enfermedad. La madre puede alimentar al bebé con leche materna siempre que no sea portadora del virus del VIH.