Opciones de tratamiento para el síndrome de Guillain-Barré
Contenido
- 1. Plasmaféresis terapéutica
- 2. Inmunoglobulina terapéutica
- 3. Tratamiento de fisioterapia
- Principales complicaciones del tratamiento
- Signos de mejora
- Signos de empeoramiento
Los tratamientos más utilizados para tratar el Síndrome de Guillain-Barré incluyen el uso de inmunoglobulina intravenosa o la realización de sesiones de plasmaféresis terapéutica que, aunque no pueden curar la enfermedad, ayudan a aliviar los síntomas y acelerar la recuperación.
Estos tratamientos suelen iniciarse en las Unidades de Cuidados Intensivos cuando el paciente está hospitalizado y tienen como objetivo reducir la cantidad de anticuerpos en la sangre, evitando así que causen daño a los nervios y empeore el grado de desarrollo de la enfermedad.
Ambos tipos de tratamiento tienen la misma eficacia para aliviar los síntomas y recuperar al paciente, sin embargo, el uso de inmunoglobulina es más fácil de realizar y tiene menos efectos secundarios que la plasmaféresis terapéutica. Siempre que exista la sospecha de tener este síndrome, se recomienda consultar a un neurólogo para confirmar el diagnóstico, y luego puede haber derivación a otras especialidades.
1. Plasmaféresis terapéutica
La plasmaféresis es un tipo de tratamiento que consiste en filtrar la sangre para eliminar el exceso de sustancias que pueden estar causando la enfermedad. En el caso del Síndrome de Guillain-Barré, la plasmaféresis se realiza para eliminar el exceso de anticuerpos que actúan contra el sistema nervioso periférico y provocan los síntomas de la enfermedad.
Luego, la sangre filtrada regresa al cuerpo, que es estimulado para producir anticuerpos saludables, lo que alivia los síntomas de la enfermedad. Comprende cómo se realiza la plasmaféresis.
2. Inmunoglobulina terapéutica
El tratamiento con inmunoglobulinas consiste en inyectar anticuerpos sanos directamente en la vena que actúa contra los anticuerpos que están causando la enfermedad. Así, el tratamiento con inmunoglobulina se vuelve efectivo porque promueve la destrucción de anticuerpos que actúan contra el sistema nervioso, aliviando los síntomas.
3. Tratamiento de fisioterapia
La fisioterapia es importante en el Síndrome de Guillain-Barré porque promueve la recuperación de las funciones musculares y respiratorias, mejorando la calidad de vida de la persona. Es importante que la fisioterapia se mantenga durante largos periodos hasta que el paciente recupere la capacidad máxima.
El seguimiento de un fisioterapeuta con ejercicios diarios realizados con el paciente es necesario para estimular el movimiento de las articulaciones, mejorar la amplitud de movimiento de las articulaciones, mantener la fuerza muscular y prevenir complicaciones respiratorias y circulatorias. Ya que, para la mayoría de los pacientes, el objetivo principal es volver a caminar solo.
Cuando el paciente está hospitalizado en la UCI, se puede conectar a un aparato respiratorio y en este caso el fisioterapeuta también es importante para asegurar la oxigenación necesaria, pero después del alta se puede mantener el tratamiento fisioterapéutico durante 1 año o más, dependiendo de los avances realizados por el paciente.
Principales complicaciones del tratamiento
El tratamiento debe continuar hasta que el médico diga lo contrario; sin embargo, puede haber algunas complicaciones relacionadas con el tratamiento, que deben informarse al médico.
En el caso del tratamiento con inmunoglobulina intravenosa, por ejemplo, algunas de las complicaciones habituales son dolor de cabeza, dolor muscular, escalofríos, fiebre, náuseas, temblores, cansancio excesivo y vómitos. Las complicaciones más graves, por difíciles que sean, son la insuficiencia renal, el infarto y la formación de coágulos, por ejemplo.
En el caso de la plasmaféresis, puede haber una disminución de la presión arterial, un cambio en la frecuencia cardíaca, fiebre, mareos, mayor probabilidad de infecciones y disminución de los niveles de calcio. Entre las complicaciones más graves se encuentran la hemorragia, la infección generalizada, la formación de coágulos y la acumulación de aire en las membranas pulmonares, sin embargo, estas complicaciones son más difíciles de suceder.
Por lo general, estas complicaciones se tratan con el uso de medicamentos, analgésicos y antieméticos para aliviar la fiebre y las ganas de vomitar, por ejemplo, y es importante informar al médico de los síntomas experimentados.
Signos de mejora
Los signos de mejoría en el síndrome de Guillain-Barré comienzan a aparecer aproximadamente 3 semanas después del inicio del tratamiento, sin embargo, la mayoría de los pacientes no recuperan el control de sus movimientos hasta pasados 6 meses.
Signos de empeoramiento
Los signos de empeoramiento del síndrome de Guillain-Barré ocurren aproximadamente 2 semanas después del inicio de los primeros síntomas de la enfermedad e incluyen dificultad para respirar, cambios repentinos en la presión arterial e incontinencia, por ejemplo, y ocurren cuando el tratamiento no se realiza correctamente correctamente.