Ureterocele

Un ureterocele es una hinchazón en la parte inferior de uno de los uréteres. Los uréteres son los conductos que transportan la orina desde el riñón hasta la vejiga. El área inflamada puede bloquear el flujo de orina.

Un ureterocele es un defecto congénito.

Se produce un ureterocele en la parte inferior del uréter. Es la parte por donde el tubo ingresa a la vejiga. El área hinchada evita que la orina se mueva libremente hacia la vejiga. La orina se acumula en el uréter y estira sus paredes. Se expande como un globo de agua.

Un ureterocele también puede hacer que la orina fluya hacia atrás desde la vejiga hasta el riñón. A esto se le llama reflujo.

Los ureteroceles ocurren en aproximadamente 1 de cada 500 personas. Esta condición es igualmente común en los uréteres izquierdo y derecho.

La mayoría de las personas con ureteroceles no presentan ningún síntoma. Cuando se presentan síntomas, pueden incluir:

• Dolor abdominal
• Dolor de espalda que puede estar solo en un lado.
• Dolor intenso en el costado (flanco) y espasmos que pueden llegar a la ingle, los genitales y el muslo
• Sangre en la orina
• Dolor ardiente al orinar (disuria)
• Fiebre
• Dificultad para iniciar el flujo de orina o disminución del flujo de orina.

Algunos otros síntomas son:

• Orina con mal olor
• Micción frecuente y urgente
• Bulto (masa) en el abdomen que se puede sentir
• El tejido del ureterocele cae (prolapso) a través de la uretra femenina hacia la vagina
• Incontinencia urinaria

Los ureteroceles grandes a menudo se diagnostican antes que los más pequeños. Se puede descubrir en una ecografía del embarazo antes de que nazca el bebé.

Algunas personas con ureteroceles no saben que tienen la afección. A menudo, el problema se encuentra más tarde en la vida debido a cálculos renales o una infección.

Un análisis de orina puede revelar sangre en la orina o signos de infección del tracto urinario.

Se pueden realizar las siguientes pruebas:

• Ultrasonido abdominal
• Tomografía computarizada del abdomen
• Cistoscopia (examen del interior de la vejiga)
• Pielograma
• Gammagrafía renal con radionúclidos
• Cistouretrograma miccional

La presión arterial puede estar alta si hay daño renal.

A menudo se administran antibióticos para prevenir más infecciones hasta que se pueda realizar la cirugía.

El objetivo del tratamiento es eliminar el bloqueo. Los drenajes colocados en el uréter o en el área renal (stents) pueden aliviar los síntomas a corto plazo.

La cirugía para reparar el ureterocele cura la afección en la mayoría de los casos. Su cirujano puede cortar el ureterocele. Otra cirugía puede implicar la extirpación del ureterocele y volver a unir el uréter a la vejiga. El tipo de cirugía depende de su edad, estado general de salud y extensión del bloqueo.

El resultado varía. El daño puede ser temporal si el bloqueo se puede curar. Sin embargo, el daño al riñón puede ser permanente si la afección no desaparece.

La insuficiencia renal es poco común. El otro riñón suele funcionar normalmente.

Las complicaciones pueden incluir:

• Daño de la vejiga a largo plazo (retención urinaria)
• Daño renal a largo plazo, incluida la pérdida de función en un riñón
• Infección del tracto urinario que sigue reapareciendo.

Comuníquese con su proveedor de atención médica si tiene síntomas de ureterocele.

Incontinencia - ureterocele

• Tracto urinario femenino
• Tracto urinario masculino
• Ureterocele

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