Dolores y molestias durante el embarazo.

Durante el embarazo, su cuerpo sufrirá muchos cambios a medida que su bebé crece y sus hormonas cambian. Junto con los otros síntomas comunes durante el embarazo, a menudo notará nuevos dolores y molestias.

Los dolores de cabeza son comunes durante el embarazo. Antes de tomar un medicamento, pregúntele a su proveedor de atención médica si es seguro tomarlo. Además de los medicamentos, las técnicas de relajación pueden ayudar.

Los dolores de cabeza pueden ser un signo de preeclampsia (presión arterial alta durante el embarazo). Si sus dolores de cabeza empeoran y no desaparecen fácilmente cuando descansa y toma acetaminofén (Tylenol), especialmente hacia el final de su embarazo, informe a su proveedor.

La mayoría de las veces, esto ocurre entre las 18 y las 24 semanas. Cuando sienta estiramiento o dolor, muévase lentamente o cambie de posición.

Son normales los dolores leves y que duran poco tiempo. Pero consulte a su proveedor de inmediato si tiene dolor abdominal intenso y constante, posibles contracciones, o si tiene dolor y sangra o tiene fiebre. Estos son síntomas que pueden indicar problemas más graves, como:

• Desprendimiento de placenta (la placenta se separa del útero)
• Trabajo prematuro
• Enfermedad de la vesícula
• Apendicitis

A medida que su útero crece, puede presionar los nervios de sus piernas. Esto puede causar entumecimiento y hormigueo (sensación de hormigueo) en las piernas y los dedos de los pies. Esto es normal y desaparecerá después de dar a luz (puede llevar algunas semanas o meses).

También puede sentir entumecimiento u hormigueo en los dedos y las manos. Puede notarlo con más frecuencia cuando se despierta por la mañana. Esto también desaparece después de dar a luz, aunque, de nuevo, no siempre de inmediato.

Si le resulta incómodo, puede usar un aparato ortopédico por la noche. Pregúntele a su proveedor dónde conseguir uno.

Haga que su proveedor revise cualquier entumecimiento, hormigueo o debilidad persistente en cualquier extremidad para asegurarse de que no haya un problema más grave.

El embarazo tensa la espalda y la postura. Para evitar o reducir los dolores de espalda, puede:

• Manténgase en forma, camine y estírese con regularidad.
• Use zapatos de tacón bajo.
• Duerma de lado con una almohada entre las piernas.
• Siéntese en una silla con buen apoyo para la espalda.
• Evite estar de pie por mucho tiempo.
• Doble las rodillas al levantar cosas. No doble la cintura.
• Evite levantar objetos pesados.
• Evite aumentar demasiado de peso.
• Use calor o frío en la parte dolorida de su espalda.
• Haga que alguien le masajee o frote la parte dolorida de su espalda. Si acude a un masajista profesional, infórmele que está embarazada.
• Haga los ejercicios de espalda que le sugiera su proveedor para aliviar el estrés de la espalda y mantener una postura saludable.

El peso adicional que carga cuando está embarazada puede hacer que le duelan las piernas y la espalda.

Su cuerpo también producirá una hormona que afloja los ligamentos de todo el cuerpo para prepararla para el parto. Sin embargo, estos ligamentos más flojos se lesionan más fácilmente, con mayor frecuencia en la espalda, así que tenga cuidado cuando levante y haga ejercicio.

Los calambres en las piernas son comunes en los últimos meses del embarazo. A veces, estirar las piernas antes de acostarse reducirá los calambres. Su proveedor puede mostrarle cómo estirarse de manera segura.

Esté atento al dolor y la hinchazón en una pierna, pero no en la otra. Esto puede ser un signo de un coágulo de sangre. Informe a su proveedor si esto sucede.

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