Cáncer de testículo: 5 síntomas, causas y tratamiento principales

Contenido
- Posibles signos de cáncer testicular avanzado
- Cómo confirmar el diagnóstico
- Posibles causas de cáncer testicular
- Como se hace el tratamiento
- ¿El tratamiento causa infertilidad?
- Etapas del cáncer testicular
El cáncer de testículo es un tipo de tumor poco común que aparece principalmente en jóvenes de entre 15 y 35 años. Además, el cáncer de testículo es más común en hombres que ya han sufrido traumatismos en la región, como es el caso de los deportistas, por ejemplo.
El cáncer generalmente se desarrolla sin síntomas y, por lo tanto, puede ser difícil de identificar. Sin embargo, los más comunes incluyen:
- Presencia de nódulos duros e indoloro del tamaño de un guisante;
- Tamaño aumentado y, en consecuencia, el peso de los testículos;
- Aumento de senos o sensibilidad en la región;
- Un testículo más duro que el otro;
- Dolor testicular al sentirlo o dolor en el testículo después de un contacto íntimo.

La mejor manera de identificar posibles signos de cáncer es autoexaminar regularmente los testículos en el baño, por ejemplo, ya que ayuda a identificar algunos cambios tempranos que pueden convertirse en cáncer.
Consulta el paso a paso para hacer el autoexamen testicular correctamente o mira el video:
Si surgen cambios en el autoexamen, se recomienda consultar a un urólogo para pruebas diagnósticas, como ecografía, análisis de sangre específicos o tomografía, para confirmar el diagnóstico e iniciar el tratamiento adecuado, si es necesario.
También existen otros problemas testiculares que pueden provocar síntomas muy similares al cáncer, especialmente la presencia de un bulto, pero que son signo de afecciones menos graves, como epididimitis, quistes o varicocele, pero que deben tratarse adecuadamente. Vea otras 7 causas de bulto en el testículo.
Posibles signos de cáncer testicular avanzado
Cuando el cáncer ya se encuentra en una etapa más avanzada, puede terminar extendiéndose a otras partes del cuerpo y generar otros síntomas como:
- Dolor constante en la parte inferior de la espalda;
- Sensación de falta de aire o tos frecuente;
- Dolor constante en el vientre;
- Dolor de cabeza o confusión frecuentes.
Estos signos son más raros y generalmente indican que el cáncer se ha diseminado a otros sitios como los ganglios linfáticos, pulmón, hígado o cerebro, por ejemplo.
En esta etapa, el cáncer es más difícil de combatir, sin embargo, el tratamiento se realiza para tratar de disminuir el tamaño de la lesión y aliviar los síntomas.
Cómo confirmar el diagnóstico
La mejor manera de confirmar que el cáncer testicular existe realmente es consultar a un urólogo. El médico, además de realizar una valoración física, identificar síntomas y confirmar antecedentes familiares, también puede solicitar una ecografía o un análisis de sangre para confirmar la presencia de cáncer. Además, también puede realizar una biopsia del tejido en uno de los testículos, si parece haber cambios que sugieran cáncer.
Posibles causas de cáncer testicular
La causa del cáncer de testículo aún no se comprende completamente, sin embargo, existen algunos factores que parecen aumentar el riesgo de que un hombre desarrolle este tipo de cáncer. Los principales son:
- Tener un testículo que no ha bajado;
- Tiene antecedentes familiares de cáncer testicular;
- Haber tenido cáncer en un testículo;
- Tener entre 20 y 34 años.
Además, ser caucásico también parece incrementar el riesgo de padecer este tipo de cáncer hasta en 5 veces, en comparación con la raza negra, por ejemplo.

Como se hace el tratamiento
El tratamiento del cáncer de testículo depende del curso de la enfermedad, ya que puede variar entre radioterapia, quimioterapia o cirugía. Sin embargo, el cáncer de testículo es curable en la mayoría de los casos, incluso cuando se han formado metástasis.
Así, el tratamiento suele iniciarse con cirugía para extirpar el testículo afectado y todas las células cancerosas, siendo suficiente en casos de cáncer menos desarrollados. En casos más avanzados, puede ser necesario someterse a radioterapia o quimioterapia después de la cirugía, para eliminar las células tumorales restantes que puedan haber quedado.
Después del tratamiento, el urólogo hace varias citas para realizarse análisis de sangre y tomografías computarizadas, con el fin de evaluar si el cáncer se ha eliminado por completo.
¿El tratamiento causa infertilidad?
Por lo general, un hombre solo es infértil cuando es necesario extirpar ambos testículos, lo que ocurre en algunos casos. Sin embargo, en estos casos es posible conservar algunos espermatozoides en laboratorios especializados antes de la cirugía, que luego se pueden utilizar para realizar inseminación artificial, por ejemplo, permitiendo que nazcan niños.
Etapas del cáncer testicular
Hay 4 etapas principales en el desarrollo del cáncer de testículo:
- Estadio 0: el cáncer se encuentra solo en los túbulos seminíferos dentro del testículo y no se ha diseminado a otras partes ni a los ganglios linfáticos.
- Estadio I: las células cancerosas han salido de los túbulos seminíferos y, por lo tanto, pueden estar afectando estructuras cercanas a los testículos; sin embargo, el cáncer aún no ha llegado a los ganglios linfáticos;
- Estadio II: el cáncer puede haber crecido fuera del testículo o el tamaño no se puede evaluar correctamente. Además, puede haberse propagado a uno o más ganglios linfáticos;
- Estadio III: el cáncer puede haber crecido fuera del testículo, pero el tamaño no se puede evaluar correctamente. El cáncer también puede haber alcanzado los ganglios linfáticos y otras estructuras cercanas.
Normalmente, cuanto más avanzada es la etapa del cáncer, más difícil puede ser el tratamiento y puede ser necesario extirpar los testículos para obtener una cura.