Miocardiopatía diabética: que es, síntomas y tratamiento

Contenido

• Síntomas principales
• Porque pasa
• Como se hace el tratamiento

La miocardiopatía diabética es una complicación poco común de la diabetes mal controlada, que provoca cambios en el funcionamiento normal del músculo cardíaco y puede, con el tiempo, provocar insuficiencia cardíaca. Vea cuáles son los signos de insuficiencia cardíaca.

Generalmente, este tipo de miocardiopatía no se relaciona con otros factores como la hipertensión arterial o la enfermedad coronaria y, por tanto, se atribuye a cambios provocados por la diabetes.

Síntomas principales

Aunque en la mayoría de los casos la miocardiopatía diabética no causa ningún síntoma antes del inicio de la insuficiencia cardíaca, es común experimentar cierta sensación de falta de aire constante.

Sin embargo, este síntoma se acompaña rápidamente de otros signos clásicos de insuficiencia cardíaca como:

• Hinchazón de las piernas;
• Dolor de pecho;
• Respiración dificultosa;
• Cansancio frecuente;
• Tos seca constante.

En las primeras etapas, cuando aún no hay síntomas, la miocardiopatía se puede detectar mediante cambios en el electrocardiograma o exámenes de ecocardiograma, por ejemplo, por lo que se recomienda realizar chequeos revistas médicas para identificar estas y otras complicaciones de la diabetes a tiempo.

Consulte una lista completa de las complicaciones más comunes de la diabetes y cómo identificarlas.

Porque pasa

En los casos de diabetes mal controlada, el ventrículo izquierdo del corazón se dilata más y, por tanto, comienza a tener dificultad para contraerse y expulsar la sangre. Con el tiempo, esta dificultad provoca una acumulación de sangre en los pulmones, piernas y otras partes del cuerpo.

Con el exceso de líquidos en todo el cuerpo, la presión arterial aumenta, lo que dificulta el funcionamiento del corazón. Por tanto, en los casos más avanzados, surge la insuficiencia cardíaca, ya que el corazón ya no puede bombear sangre correctamente.

Como se hace el tratamiento

El tratamiento de la miocardiopatía diabética se recomienda cuando los síntomas interfieren con las tareas diarias o causan muchas molestias, y se puede realizar con el uso de:

• Remedios de presión, como Captopril o Ramipril: reducen la presión arterial y facilitan que el corazón bombee sangre;
• Diuréticos asa, como Furosemida o Bumetanida: eliminan el exceso de líquido en la orina, evitando la acumulación de líquido en los pulmones;
• Cardiotónicos, como la digoxina: aumentan la fuerza del músculo cardíaco para facilitar el trabajo de bombeo de sangre;
• Anticoagulantes orales, Acenocumarol o Warfarina: disminuyen el riesgo de desarrollar un ataque cardíaco o un derrame cerebral debido a la fibrilación auricular común en diabéticos con miocardiopatía.

Sin embargo, incluso sin síntomas, es recomendable mantener la diabetes bien controlada, siguiendo las indicaciones del médico, controlando el peso corporal, comiendo sano y practicando ejercicio físico de forma regular, ya que esta es una gran forma de fortalecer el corazón y evitar complicaciones, como insuficiencia cardíaca.

Vea cómo puede mantener su diabetes bajo control y evitar este tipo de problemas.