8 causas principales de la diarrea crónica y que hacer
Contenido
- 1. Intolerancias o alergias alimentarias
- 2. Infecciones intestinales
- 3. Síndrome del intestino irritable
- 4. Uso de algunos medicamentos
- 5. Enfermedades del intestino
- 6. Enfermedades del páncreas
- 7. Fibrosis quística
- 8. Cáncer de intestino
- Como se hace el tratamiento
- Que comer en caso de diarrea crónica.
La diarrea crónica es aquella en la que el aumento del número de evacuaciones intestinales por día y el ablandamiento de las heces se prolonga durante un período superior o igual a 4 semanas y que puede ser causada por infecciones microbianas, intolerancia alimentaria, inflamación intestinal o uso de medicamentos.
Para identificar la causa de la diarrea crónica y el tratamiento adecuado a iniciar, la persona debe acudir al gastroenterólogo para evaluar los síntomas y solicitar pruebas que puedan ayudar en la identificación de la causa, con el examen habitual de heces y análisis de sangre.
La diarrea crónica se produce como consecuencia de una irritación en el sistema gastrointestinal que puede tener varias causas, siendo las principales:
1. Intolerancias o alergias alimentarias
Algunas intolerancias como la lactosa o el gluten, o la alergia a la proteína de la leche, pueden provocar irritación e inflamación en el intestino y provocar diarrea crónica, ya que el diagnóstico de este tipo de afecciones puede tardar un tiempo. Además, dependiendo de la causa, pueden aparecer otros síntomas asociados a la diarrea.
Que hacer: Es importante consultar al gastroenterólogo para que se realice una evaluación de los síntomas y se indique la realización de pruebas, como análisis de sangre, determinación de anticuerpos IgE o antigliadina, pruebas cutáneas y de heces. Además, la prueba de provocación oral, que consiste en ingerir el alimento, del que se sospecha intolerancia o alergia, y luego se observa si aparece algún síntoma.
2. Infecciones intestinales
Algunas infecciones intestinales provocadas por parásitos como la giardiasis, amebiasis o ascariasis, por ejemplo, así como las infecciones por bacterias y virus, principalmente rotavirus, pueden provocar diarreas crónicas cuando no se detectan rápidamente. En general, las infecciones intestinales también pueden ocasionar otros síntomas como dolor abdominal, aumento de la producción de gases, fiebre, vómitos, entre otros.
Que hacer: En general, el tratamiento de las infecciones intestinales consiste en reposo, hidratación con sueros caseros o sueros de rehidratación oral, y alimentos de fácil digestión. Sin embargo, dependiendo de la causa de la infección, el médico también puede indicar el uso de medicamentos para combatir el agente infeccioso, y pueden estar indicados antibióticos o agentes antiparasitarios.
Por tanto, si los síntomas persisten por más de 3 días o si hay fiebre alta o sangre en las heces, es importante consultar al gastroenterólogo o al médico de cabecera para que se evalúen los síntomas y se indique el tratamiento más adecuado. Vea más detalles del tratamiento para la infección intestinal.
Mira en el siguiente video cómo preparar suero casero:
3. Síndrome del intestino irritable
El síndrome del intestino irritable es una enfermedad en la que se observa inflamación de las vellosidades intestinales, que puede provocar diarrea crónica, gases excesivos, dolor abdominal e inflamación. Estos síntomas pueden variar según su intensidad, y pueden aparecer de un momento a otro, permanecer por un tiempo y luego desaparecer.
Que hacer: Es importante en estos casos buscar al gastroenterólogo para que se pueda llegar al diagnóstico valorando los síntomas y realizando algunas pruebas como colonoscopia, tomografía computarizada y examen de heces.
En general, el tratamiento consiste en realizar una dieta específica, baja en grasas y azúcares y, en algunos casos, el médico también puede indicar el uso de algunos medicamentos. Consulte más detalles sobre el tratamiento del síndrome del intestino irritable.
4. Uso de algunos medicamentos
Existen algunos fármacos que pueden alterar la flora bacteriana, la motilidad intestinal y las vellosidades intestinales, resultando en un efecto laxante y dando lugar a diarrea como efecto secundario, que puede provocar este trastorno gastrointestinal por toxicidad cuando el fármaco se utiliza en dosis superiores a las recomendadas.
Algunos de estos medicamentos son antibióticos, algunos antidepresivos, medicamentos para tratar el cáncer, antiácidos e inhibidores de la bomba de protones, como omeprazol y lansoprazol, entre otros.
Que hacer: Si la diarrea es provocada por antibióticos, la mejor forma de combatir los síntomas es con el consumo de probióticos, un suplemento que se puede encontrar en farmacias y que contiene bacterias encargadas de regular la función intestinal.
Si es provocado por otros medicamentos, lo más recomendado es consultar al médico que le indicó el medicamento y reportar el efecto secundario. Además, también es importante tener una dieta de fácil digestión y mantenerse hidratado para mejorar la diarrea.
Obtenga más información sobre los probióticos y descubra cuál es el mejor viendo el siguiente video:
5. Enfermedades del intestino
Las enfermedades intestinales, como la enfermedad de Crohn, la colitis ulcerosa, la enteritis o la enfermedad celíaca, también pueden causar diarrea crónica, ya que producen una inflamación crónica en el intestino provocando no solo diarrea sino otros síntomas según la enfermedad presente.
Que hacer: En tales casos, se recomienda consultar al gastroenterólogo para que se realice una evaluación y se puedan indicar pruebas diagnósticas que puedan identificar la enfermedad e iniciar el tratamiento más adecuado. Además, una vez obtenido el diagnóstico, es importante consultar al nutricionista, ya que la alimentación juega un papel fundamental en el alivio de los síntomas asociados a este tipo de enfermedades.
6. Enfermedades del páncreas
En enfermedades del páncreas, como insuficiencia pancreática, pancreatitis crónica o en casos de cáncer de páncreas, este órgano tiene dificultades para producir o transportar cantidades suficientes de enzimas digestivas para permitir la digestión y posterior absorción de los alimentos en el intestino. Esto provoca cambios principalmente en la absorción de grasas, provocando diarreas crónicas, que pueden ser pastosas, brillantes o con grasa.
Que hacer: En tales casos, es importante consultar a un nutricionista para que elabore un plan nutricional adaptado a las condiciones de la persona, que permitirá mejorar la absorción de nutrientes, evitar la pérdida de peso y la posible desnutrición y paliar el malestar que pueden ocasionar estas enfermedades.
Además, es posible que sea necesaria la suplementación de algunas vitaminas y minerales, cuya absorción se ha visto alterada por la frecuencia de las deposiciones líquidas, además de que la pancreatina está indicada por el médico, que es un medicamento que sustituye a las enzimas digestivas y Ayuda a mejorar la digestión y la absorción de los alimentos, mejorando la diarrea.
7. Fibrosis quística
Algunas enfermedades genéticas también pueden provocar cambios en el tejido del tracto digestivo, como la fibrosis quística, una enfermedad que afecta la producción de secreciones de varios órganos, principalmente en los pulmones e intestino, haciéndolos más gruesos y viscosos, y dar como resultado la alternancia. períodos de diarrea y estreñimiento.
Además, pueden aparecer otros síntomas asociados, como dificultad para respirar, tos persistente, frecuentes infecciones pulmonares, heces grasas y malolientes, mala digestión, pérdida de peso, entre otros.
Que hacer: Por lo general, esta enfermedad genética se identifica al nacer mediante la prueba de punción del talón, sin embargo también se puede detectar mediante otras pruebas genéticas que identifiquen la mutación responsable de esta enfermedad.
El tratamiento de la fibrosis quística se suele realizar mediante medicamentos recetados por el médico, sesiones de fisioterapia respiratoria y seguimiento nutricional para controlar la enfermedad y mejorar la calidad de vida de la persona.
8. Cáncer de intestino
El cáncer de intestino puede provocar síntomas como diarreas frecuentes, pérdida de peso, dolor abdominal, cansancio y la presencia de sangre en las heces, que pueden variar según la ubicación del cáncer y su gravedad. A continuación, se explica cómo reconocer los síntomas del cáncer de intestino.
Que hacer: Si la persona ha tenido estos síntomas durante más de 1 mes, es mayor de 50 años o tiene antecedentes familiares de cáncer de intestino, es importante consultar al gastroenterólogo. El médico evaluará los síntomas y podrá indicar la realización de pruebas diagnósticas, como examen de heces, colonoscopia o tomografía computarizada para identificar el cáncer y luego iniciar el tratamiento más adecuado.
Como se hace el tratamiento
Para tratar la diarrea crónica, inicialmente, el médico puede indicar formas de prevenir la deshidratación o desnutrición, brindando orientación sobre cómo aumentar el consumo de líquidos y la alimentación diaria.
Luego, se realiza el tratamiento definitivo según la causa de la diarrea, que puede incluir el uso de remedios antibióticos o vermífugos para tratar infecciones, eliminación de medicamentos que puedan tener efecto laxante o medicamentos con efectos antiinflamatorios para enfermedades autoinmunes, por ejemplo. ejemplo.
Que comer en caso de diarrea crónica.
Cuando se tiene diarrea crónica, es importante buscar un nutricionista para no solo adaptar la dieta a la enfermedad de base, sino también para evaluar la necesidad de comenzar a usar suplementos nutricionales para ayudar a mantener o recuperar peso, así como la ingesta de vitaminas y minerales, si es necesario.
Es importante que los alimentos sean fáciles de digerir y absorber, y pueden incluir:
- Sopas y purés de verduras cocidas, que no estimulan el intestino, como calabaza, zanahoria, calabacín, chayote, papa, camote;
- Plátanos verdes y frutas hervidas o tostadas, como manzana, melocotón o pera;
- Gachas de arroz o maíz;
- Arroz cocido;
- Carnes blancas cocidas o asadas, como pollo o pavo;
- Pescado cocido oa la plancha.
Además, es fundamental beber unos 2 litros de líquidos al día como agua, té, agua de coco o jugos de frutas colados, y tomar suero casero o suero de rehidratación oral que se puede encontrar en farmacias. Estos sueros deben tomarse inmediatamente después de cada evacuación intestinal, aproximadamente en la misma cantidad que se pierde líquido, esto evitará la pérdida de minerales y la deshidratación.
Consulte, en el siguiente video, las pautas de nuestro nutricionista sobre qué comer en caso de diarrea: