Dolor de pierna: 6 causas comunes y que hacer
Contenido
- 1. Cambios en músculos o tendones
- 2. Problemas articulares
- 3. Cambios en la columna
- 4. Ciática
- 5. Mala circulación sanguínea
- 6. Dolor de crecimiento
- Otras causas menos frecuentes
- Dolor de piernas durante el embarazo
- Cómo se hace el diagnóstico
- Cuando ir al doctor
El dolor de pierna puede tener varias causas, como mala circulación, ciática, esfuerzo físico excesivo o neuropatía y, por tanto, para identificar su causa se debe observar la ubicación exacta y las características del dolor, así como si las dos piernas se ven afectadas o solo uno y si el dolor empeora o mejora con el reposo.
Por lo general, el dolor en la pierna que no mejora con el reposo indica problemas de circulación, como enfermedad vascular periférica, mientras que el dolor en las piernas al despertar puede ser un signo de calambres nocturnos o falta de circulación. El dolor de piernas y espalda, por otro lado, puede ser un síntoma de problemas espinales o compresión del nervio ciático, por ejemplo.
Algunas de las principales causas del dolor en las piernas son:
1. Cambios en músculos o tendones
El dolor muscular osteoide en las piernas no sigue el camino de los nervios y empeora cuando las piernas se mueven. Algunos cambios que pueden ser la causa del dolor incluyen miositis, tenosinovitis, absceso del muslo y fibromialgia. El dolor muscular puede surgir después de un esfuerzo físico brusco, como después de un ejercicio físico intenso o al llevar un zapato incómodo. En estos casos, el dolor suele aparecer al final del día y, a menudo, se siente como "cansancio en las piernas". Otra causa común de dolor muscular en las piernas son los calambres que generalmente ocurren durante la noche y son muy comunes durante el embarazo.
El dolor de patata en las piernas también puede ser causado por el síndrome compartimental, que causa dolor e hinchazón severos en las piernas, que surgen de 5 a 10 minutos después de comenzar la actividad física y la región permanece dolorida durante períodos prolongados. El dolor en la región anterior de la pierna también puede ser causado por una tendinitis del tibial anterior, que se presenta en deportistas y personas que practican una actividad física muy intensa, como los corredores de fondo.
Que hacer: Toma un baño tibio y acuéstate con las piernas elevadas porque esto facilita la circulación sanguínea, reduciendo el cansancio. El descanso también es importante, pero no es necesario el descanso absoluto, solo está indicado para evitar entrenamientos y grandes esfuerzos. En caso de tendinitis, el uso de hielo y ungüentos antiinflamatorios puede ayudar a una curación más rápida.
2. Problemas articulares
Especialmente en los ancianos, el dolor en las piernas puede estar relacionado con problemas ortopédicos como la artritis o la osteoartritis. En estos casos, deben presentarse otros síntomas, como dolor en las articulaciones y rigidez en los primeros 15 minutos de la mañana. El dolor puede no estar presente todos los días pero tiende a empeorar al hacer esfuerzos y se reduce con el descanso. La deformidad de la rodilla puede indicar artrosis, mientras que una apariencia más roja y caliente puede indicar artritis. Sin embargo, el dolor de rodilla también puede estar presente después de una caída, una enfermedad de la cadera o una diferencia en la longitud de las piernas.
Que hacer: aplique una compresa caliente en la articulación afectada, como la rodilla o el tobillo, durante unos 15 minutos. Además, se recomienda consultar al ortopedista ya que puede ser necesario tomar antiinflamatorios o someterse a fisioterapia.
3. Cambios en la columna
Cuando el dolor en las piernas empeora con el movimiento de la columna, puede ser causado por lesiones en la columna. La estenosis del canal espinal puede causar dolor moderado o severo con sensación de pesadez o calambres en la espalda baja, glúteos, muslos y piernas al caminar. En este caso, el dolor solo se alivia al sentarse o inclinar el tronco hacia adelante, la sensación de entumecimiento puede estar presente. La espondilolistesis también es una posible causa de dolor de espalda que se irradia a las piernas, en cuyo caso el dolor es en una sensación de pesadez en la columna lumbar, la persona camina con dolor pero lo alivia durante el reposo. Las hernias de disco también causan dolor de espalda que se irradia a las piernas, el dolor es agudo, intenso y puede irradiarse a los glúteos, posterior de la pierna, lateral de la pierna y tobillo y planta del pie.
Que hacer: La colocación de una compresa tibia en el lugar del dolor puede aliviar los síntomas, pero el médico puede recomendar tomar antiinflamatorios y recomendar fisioterapia.
4. Ciática
Cuando el dolor en las piernas es causado por cambios en el nervio ciático, la persona puede sentir dolor en la espalda, los glúteos y la parte posterior del muslo, y también puede haber hormigueo o debilidad en las piernas. El dolor puede ser insoportable, en forma de punzada o conmoción que de repente se instala en la parte inferior de la espalda y se irradia a las piernas, afectando las nalgas, la parte posterior del muslo, el costado de la pierna, el tobillo y el pie.
Si cree que el dolor es causado por el nervio ciático, responda las siguientes preguntas:
- 1. Hormigueo, entumecimiento o conmoción en la columna, glúteos, piernas o plantas.
- 2. Sensación de ardor, escozor o pierna cansada.
- 3. Debilidad en una o ambas piernas.
- 4. Dolor que empeora al permanecer quieto durante mucho tiempo.
- 5. Dificultad para caminar o permanecer en la misma posición durante mucho tiempo.
Que hacer: colocando una compresa tibia en el sitio del dolor, dejándolo actuar durante 20 minutos, además de evitar esfuerzos, levantar objetos pesados y, en algunos casos, puede ser necesario someterse a fisioterapia. Mira algunos ejemplos de ejercicios que puedes hacer en casa para combatir la ciática en el siguiente video:
5. Mala circulación sanguínea
El dolor en las piernas causado por la mala circulación afecta principalmente a los ancianos y puede aparecer en cualquier momento del día, pero empeora después de pasar un tiempo sentado o de pie en la misma posición. Los pies y los tobillos pueden estar hinchados y de color púrpura, lo que indica dificultad para devolver la sangre al corazón.
Una situación algo más grave es la aparición de trombosis, que ocurre cuando un pequeño coágulo es capaz de interrumpir parte de la circulación a las piernas. En este caso, el dolor se localiza, con mayor frecuencia, en la pantorrilla y hay dificultad para mover los pies. Esta es una situación que puede ocurrir después de la cirugía o cuando se usan anticonceptivos sin consejo médico.
Que hacer: Acostarse boca arriba con las piernas elevadas durante 30 minutos puede ayudar, pero su médico puede recomendar el uso de medicamentos para mejorar la circulación, así como el uso de medias de compresión elásticas. Si se sospecha una trombosis, debe ir al hospital rápidamente.
6. Dolor de crecimiento
El dolor de piernas en niños o adolescentes puede ser causado por un rápido crecimiento de los huesos, que puede ocurrir alrededor de los 3 a 10 años, y no es un cambio serio. La ubicación del dolor es más cercana a la rodilla pero puede afectar a toda la pierna, llegando hasta el tobillo, y es común que el niño se queje por la noche antes de irse a dormir o después de haber realizado algún tipo de actividad física más intensa. Aprenda sobre el dolor creciente en su hijo.
Que hacer: Colocar guijarros de hielo dentro de un calcetín y colocarlo en el área dolorida, dejándolo actuar durante 10 a 15 minutos, puede ayudar a aliviar el dolor. Los padres también pueden darse un masaje con crema hidratante o aceite de almendras y dejar que el niño descanse. No es necesario detener la actividad física, solo disminuir su intensidad o frecuencia semanal.
Otras causas menos frecuentes
Otras causas menos frecuentes son la hemocromatosis, la gota, la enfermedad de Paget, la osteomalacea o los tumores. Cuando el dolor en las piernas está más relacionado con el cansancio y la falta de energía, el médico puede sospechar fibromialgia, síndrome de fatiga crónica o dolor miofacial, por ejemplo.Por lo tanto, para saber exactamente qué está causando el dolor en las piernas, es posible que necesite una evaluación médica o fisioterapéutica.
Dolor de piernas durante el embarazo
El dolor en las piernas durante el embarazo es un síntoma muy común y normal, especialmente al inicio del embarazo, ya que hay un gran aumento en la producción de estrógenos y progesterona, que provocan la dilatación de las venas de las piernas, aumentando el volumen de sangre en las piernas de la mujer. El crecimiento del bebé en el útero, así como el aumento de peso de la mujer embarazada, provocan la compresión del nervio ciático y la vena cava inferior, lo que provoca hinchazón y dolor en las piernas.
Para aliviar este malestar, la mujer puede acostarse boca arriba con las rodillas flexionadas, realizando un ejercicio de estiramiento de la columna y descansando con las piernas levantadas.
Cómo se hace el diagnóstico
El médico podrá observar los síntomas y examinar al individuo, observando las curvaturas de la columna, extremidades óseas, podrá realizar pruebas de provocación de dolor, y también la palpación del abdomen para evaluar si existe dolor en el región abdominal o pélvica. Los análisis de sangre, las pruebas del líquido sinovial pueden ser útiles si se sospecha de sinovitis o artritis, y se pueden solicitar pruebas de imagen como radiografías o resonancias magnéticas si se sospechan cambios en la columna. En base a los resultados se puede llegar al diagnóstico y se indica el tratamiento más adecuado para cada caso.
Cuando ir al doctor
Es recomendable acudir al médico cuando el dolor en las piernas es muy intenso o cuando existen otros síntomas. También es importante acudir al médico:
- Cuando el dolor de pierna es localizado y muy intenso;
- Cuando hay rigidez en la pantorrilla;
- En caso de fiebre;
- Cuando los pies y los tobillos están muy hinchados;
- En caso de sospecha de fractura;
- Cuando no permite el trabajo;
- Cuando dificulta caminar.
En la consulta se debe mencionar la intensidad del dolor, cuándo apareció y qué se hizo para tratar de aliviarlo. El médico puede ordenar pruebas para indicar el tratamiento adecuado, que a veces puede incluir el uso de medicamentos o fisioterapia.