Ecolalia
Contenido
- Entendiendo la ecolalia
- Síntomas
- Causas y factores de riesgo.
- Tipos de ecolalia
- Ecolalia interactiva
- Ecolalia no interactiva
- Ecolalia interactiva versus no interactiva
- Diagnóstico de ecolalia
- Tratamiento
- Terapias del habla
- Medicamento
- Cuidados en el hogar
- Perspectiva y prevención de la ecolalia
Entendiendo la ecolalia
Las personas con ecolalia repiten ruidos y frases que escuchan. Es posible que no puedan comunicarse de manera efectiva porque luchan por expresar sus propios pensamientos. Por ejemplo, alguien con ecolalia solo puede repetir una pregunta en lugar de responderla. En muchos casos, la ecolalia es un intento de comunicarse, aprender un idioma o practicarlo.
La ecolalia es diferente del síndrome de Tourette, donde un hablante puede gritar o decir cosas al azar como parte de su tic. En este caso, el hablante no tiene control sobre lo que dicen o cuándo lo dicen.
El habla repetitiva es una parte extremadamente común del desarrollo del lenguaje, y se ve comúnmente en niños pequeños que están aprendiendo a comunicarse. A la edad de 2 años, la mayoría de los niños comenzarán a mezclar sus propios enunciados junto con las repeticiones de lo que escuchan. A los 3 años, la mayoría de la ecolalia de los niños será mínima.
Es común que los niños con autismo o retrasos en el desarrollo tengan ecolalia aún más en la infancia, especialmente si experimentan un retraso en el desarrollo del habla. Identificar por qué y cómo está usando su hijo la ecolalia le ayudará a desarrollar un plan de tratamiento. Consultar a un patólogo del lenguaje puede ayudar.
Síntomas
El síntoma principal de la ecolalia es la repetición de frases y ruidos que se han escuchado. Puede ser inmediato, con el hablante repitiendo algo inmediatamente después de escucharlo. También puede retrasarse, y el orador repite algo horas o días después de escucharlo.
Otros signos de ecolalia pueden incluir frustración durante las conversaciones, depresión y silencio. Una persona con ecolalia puede ser inusualmente irritable, especialmente cuando se le hacen preguntas.
Causas y factores de riesgo.
Todos los niños experimentan la ecolalia cuando aprenden un idioma hablado. La mayoría desarrolla el pensamiento independiente a medida que envejecen, pero algunos continúan repitiendo lo que escuchan. Los niños con discapacidades de comunicación se aferran a las expresiones con eco mucho más tiempo. Los niños con autismo son particularmente susceptibles a la ecolalia.
Algunas personas experimentan este problema solo cuando están angustiadas o ansiosas. Otros lo experimentan todo el tiempo, lo que eventualmente puede hacer que se queden en silencio porque no pueden expresarse.
Los adultos con amnesia severa o traumatismo craneoencefálico pueden experimentar ecolalia mientras intentan recuperar sus habilidades para hablar.
Tipos de ecolalia
Hay dos categorías principales de ecolalia: ecolalia funcional (o interactiva) y ecolalia no interactiva, donde los sonidos o las palabras pueden ser solo para uso personal en lugar de comunicación.
Ecolalia interactiva
La ecolalia funcional es un intento de comunicación que pretende ser interaccional, actuando como comunicación con otra persona. Ejemplos incluyen:
Tomar turnos: La persona con ecolalia usa frases para llenar un intercambio verbal alterno.
Terminación verbal: El habla se utiliza para completar rutinas verbales familiares que otros inician. Por ejemplo, si a las personas con ecolalia se les pide que completen una tarea, podrían decir "¡buen trabajo!" mientras lo completa, haciendo eco de lo que están acostumbrados a escuchar.
Proporcionar información: Se puede usar el habla para ofrecer nueva información, pero puede ser difícil conectar los puntos. Una madre podría preguntarle a su hijo qué quiere para almorzar, por ejemplo, y él cantará la canción de un comercial de carne de almuerzo para decir que quiere un sándwich.
Peticiones: La persona con ecolalia puede decir "¿Quieres almorzar?" pedir su propio almuerzo.
Ecolalia no interactiva
La ecolalia no interactiva generalmente no pretende ser una comunicación y está destinada para uso personal, como el etiquetado personal o la autoestimulación. Ejemplos incluyen:
Discurso no enfocado: La persona con ecolalia dice algo que no tiene relevancia para el contexto situacional, como recitar partes de un programa de televisión mientras camina por un aula. Este comportamiento puede ser autoestimulador.
Asociación de situación: El habla se desencadena por una situación, visual, persona o actividad, y no parece ser un intento de comunicación. Si alguien ve un producto de marca en la tienda, por ejemplo, podría cantar la canción de los comerciales.
Ensayo: El hablante puede pronunciar la misma frase suavemente para sí mismo algunas veces antes de responder con una voz normal. Esto puede ser una práctica para la próxima interacción.
Autodirección: La gente puede usar estas expresiones para caminar a través de un proceso. Si están haciendo un emparedado, por ejemplo, podrían decirse a sí mismos que "abran el agua. Usa jabón. Enjuagarse las manos. Cierra el agua. Manos secas. Consigue pan. Pon el pan en el plato. Obtener carne de almuerzo ", y así sucesivamente hasta que se complete el proceso.
Ecolalia interactiva versus no interactiva
La ecolalia refleja cómo el hablante procesa la información. A veces, reconocer la diferencia entre la ecolalia interactiva y no interactiva es difícil hasta que conoces al hablante y cómo se comunican. En algunos casos, la ecolalia parece estar completamente fuera de contexto.
Considere este gran ejemplo de Susan Stokes. Si un niño con ecolalia se enoja con su maestra cuando termina el recreo, de repente puede decir "¡Vete al infierno, teniente!" Más tarde, el maestro podría descubrir que el niño había estado viendo "Algunos hombres buenos" y había usado una frase que sabía que estaba ligada a la ira para transmitir sus sentimientos en ese momento. Si bien su respuesta parecía fuera de contexto, tenía una razón para usar esa frase para comunicarse.
Diagnóstico de ecolalia
Un profesional puede diagnosticar la ecolalia teniendo una conversación con la persona con ecolalia. Si luchan por hacer algo más que repetir lo que se ha dicho, pueden tener ecolalia. Algunos niños con autismo son examinados regularmente para esto durante sus lecciones de habla.
La ecolalia varía de menor a grave. Un médico puede identificar la etapa de la ecolalia y prescribir el tratamiento adecuado.
Tratamiento
La ecolalia puede tratarse mediante una combinación de los siguientes métodos:
Terapias del habla
Algunas personas con ecolalia van a sesiones regulares de terapia del habla para aprender a decir lo que piensan.
Una intervención conductual llamada "punto de pausa de señales" a menudo se usa para la ecolalia intermedia. En este tratamiento, el terapeuta del habla le pide a la persona con ecolalia que responda una pregunta correctamente y le dice que le señalará cuándo es el momento de responder. Luego, el terapeuta hace una pregunta, como "¿Cómo te llamas?" Después de una breve pausa, le piden al orador que responda. También sostienen una tarjeta de referencia con la respuesta correcta.
Medicamento
Un médico puede recetar antidepresivos o medicamentos para la ansiedad para combatir los efectos secundarios de la ecolalia. Esto no trata la condición en sí, pero ayuda a mantener a la persona con ecolalia tranquila. Dado que los síntomas de la ecolalia pueden aumentar cuando una persona está estresada o ansiosa, el efecto calmante puede ayudar a disminuir la gravedad de la afección.
Cuidados en el hogar
Las personas con ecolalia pueden trabajar con otras personas en el hogar para desarrollar sus habilidades de comunicación. Hay programas de texto y de capacitación en línea disponibles para ayudar a los padres a obtener respuestas positivas de sus hijos. Animar a un niño a usar vocabulario limitado puede facilitar que aprenda a comunicarse de manera más efectiva.
Perspectiva y prevención de la ecolalia
La ecolalia es una parte natural del desarrollo del lenguaje. No siempre es una buena idea prevenirlo por completo. Para evitar la ecolalia permanente en los niños, los padres deben fomentar otras formas de comunicación. Exponga a un niño a una gran variedad de palabras y frases. Con el tiempo, la mayoría de los niños pueden superar su ecolalia de forma natural.