Distensión de la ingle
Contenido
- Síntomas
- Causas
- Diagnóstico
- Grado 1
- Grado 2
- Grado 3
- ¿Podría ser otra cosa?
- Tratamiento
- Factores de riesgo
- Prevención
- Tiempo de recuperación
Visión de conjunto
Una distensión de la ingle es una lesión o desgarro de cualquiera de los músculos aductores del muslo. Estos son los músculos de la cara interna del muslo.
Los movimientos repentinos generalmente desencadenan una tensión aguda en la ingle, como patear, girar para cambiar de dirección mientras se corre o saltar.
Los atletas corren mayor riesgo de sufrir esta lesión. Las distensiones de la ingle no suelen ser graves, aunque una distensión grave puede tardar mucho en recuperarse.
Síntomas
Los síntomas de una distensión inguinal pueden variar de leves a graves, según el grado de la lesión. Pueden incluir:
- dolor (generalmente se siente en la parte interna del muslo, pero ubicado en cualquier lugar desde la cadera hasta la rodilla)
- disminución de la fuerza en la parte superior de la pierna
- hinchazón
- moretones
- dificultad para caminar o correr sin dolor
- chasquido en el momento de la lesión
Causas
La distensión de la ingle es más común entre los atletas profesionales y recreativos.
A menudo se debe a la tensión del músculo aductor al patear, por lo que es más común en la pierna dominante del atleta. También puede deberse a girar rápidamente al correr, patinar o saltar.
Los movimientos que requieren que su músculo se alargue y se contraiga al mismo tiempo generalmente causan una distensión en la ingle. Esto ejerce presión sobre el músculo y puede provocar que se estire demasiado o se desgarre.
Aunque los deportes son la causa más común, una distensión en la ingle también puede ocurrir por:
- que cae
- levantar objetos pesados
- otros tipos de ejercicio, como el entrenamiento de resistencia
Cualquier uso excesivo de un músculo puede provocar una tensión a largo plazo.
Diagnóstico
Para diagnosticar si tiene una distensión en la ingle, su médico primero querrá saber cómo sucedió su lesión y si las circunstancias indican una distensión en la ingle.
Las circunstancias incluyen la actividad que estaba haciendo cuando ocurrió la lesión, sus síntomas y si ha tenido una lesión similar en el pasado.
A continuación, su médico le hará un examen físico. Esto podría implicar estirar los músculos aductores para determinar si el estiramiento es doloroso, así como probar el rango de movimiento de la pierna.
Cualquier dolor que sienta durante el examen ayudará a su médico a identificar dónde se encuentra su lesión.
Además de identificar la ubicación de la distensión, su médico evaluará la gravedad de su lesión. Hay tres grados de distensiones en la ingle:
Grado 1
Una distensión de la ingle de grado 1 ocurre cuando el músculo está demasiado estirado o desgarrado, dañando hasta el 5 por ciento de las fibras musculares. Es posible que pueda caminar sin dolor, pero correr, saltar, patear o estirarse puede ser doloroso.
Grado 2
Una distensión de la ingle de grado 2 es un desgarro que daña un porcentaje significativo de las fibras musculares. Esto puede ser lo suficientemente doloroso como para dificultar el caminar. Será doloroso juntar los muslos.
Grado 3
Una distensión inguinal de grado 3 es un desgarro que atraviesa la mayor parte o la totalidad del músculo o tendón. Esto suele causar un dolor intenso y repentino en el momento en que ocurre. Usar el músculo lesionado será doloroso.
Suele haber hinchazón y hematomas importantes. Es posible que sienta un espacio en el músculo cuando toque la lesión.
¿Podría ser otra cosa?
Una distensión en la ingle puede confundirse con otros problemas. Puede experimentar síntomas similares con:
- una fractura por estrés (una rotura de la línea del cabello en el hueso púbico o fémur)
- bursitis de la cadera (inflamación del saco de líquido en la articulación de la cadera)
- un esguince de cadera (inflamación o lesión de los tendones o músculos de la cadera)
Su médico a menudo comenzará con una radiografía y seguirá con una resonancia magnética para confirmar el diagnóstico y descartar otras lesiones.
Tratamiento
Inmediatamente después de la lesión, el objetivo del tratamiento para una distensión de la ingle es reducir el dolor y la hinchazón. Los primeros días de tratamiento siguen el protocolo para cualquier lesión muscular:
- descanso
- hielo
- compresión
- elevación
- medicamentos antiinflamatorios no esteroides (para personas seleccionadas)
Dependiendo de la gravedad de su tensión, es posible que necesite tratamientos adicionales para acelerar la curación. Estos podrían incluir:
- terapia física
- Terapia de Masajes
- calor y estiramiento
- electroterapia
Si tiene una distensión de grado 3, es posible que necesite una cirugía para reparar las fibras desgarradas, especialmente donde está involucrado el tendón.
Factores de riesgo
El factor de riesgo principal para la distensión de la ingle es practicar un deporte que implica patear, girar repentinamente mientras se corre y saltar. La necesidad de cambiar de dirección con frecuencia también es un factor de riesgo.
Los atletas más comunes que sufren distensión en la ingle son los jugadores de fútbol y los jugadores de hockey sobre hielo. Sin embargo, los atletas de muchos deportes pueden estar en riesgo. Esto incluye baloncesto, fútbol, rugby, patinaje, tenis y artes marciales.
Entre los atletas que practican estos deportes, un factor de riesgo adicional es cuánto practican durante la temporada baja.
Los atletas que dejan de entrenar durante la temporada baja tienen más probabilidades de perder fuerza muscular y flexibilidad mientras no están jugando. Esto los pone en mayor riesgo de lesiones si comienzan a entrenar sin tomarse el tiempo para desarrollar su fuerza muscular y flexibilidad.
La distensión inguinal previa es otro factor de riesgo, ya que el músculo está debilitado por una lesión anterior.
Un estudio en el British Journal of Sports Medicine también encontró que tener un rango bajo de movimiento en la articulación de la cadera es un factor de riesgo para la distensión de la ingle.
Prevención
La mejor manera de prevenir la distensión de la ingle es evitar usar el músculo aductor sin el entrenamiento y la preparación adecuados. Especialmente si practica un deporte que probablemente le cause tensión en la ingle, estire y fortalezca los músculos aductores con regularidad.
Continúe entrenando durante todo el año si es posible. Si toma un descanso del entrenamiento, vuelva a trabajar gradualmente hasta su nivel anterior de actividad para evitar tensar los músculos.
Tiempo de recuperación
El tiempo de recuperación de una lesión por distensión de la ingle depende del grado de la lesión.
En general, puede medir el nivel de su recuperación por su nivel de dolor. A medida que su músculo aductor se recupere, evite actividades que impliquen dolor.
Reanude las actividades gradualmente. Esto permitirá que su músculo sane por completo y evitará que desarrolle una lesión por distensión inguinal recurrente.
El tiempo que necesita para recuperarse también dependerá de su estado físico antes de la lesión. No hay un marco de tiempo definitivo, ya que es diferente para cada individuo.
Sin embargo, como guía general, puede esperar descansar varias semanas antes de poder volver a sus actividades completas después de una distensión en la ingle.
Según el grado de su cepa, estos son los tiempos de recuperación estimados:
- Grado 1: dos a tres semanas
- Grado 2: dos a tres meses
- Grado 3: cuatro meses o más