Absceso hepático piógeno
Contenido
- ¿Qué es un absceso hepático piógeno?
- Causas del absceso hepático piógeno
- Síntomas de absceso hepático piógeno
- Diagnóstico de absceso hepático piógeno
- Tratamiento del absceso hepático piógeno.
- Complicaciones del absceso hepático piógeno.
- Perspectivas para personas con absceso hepático piógeno
¿Qué es un absceso hepático piógeno?
Un absceso hepático piógeno (PLA) es una bolsa de pus que se forma en el hígado debido a una infección bacteriana. Pus es un líquido compuesto de glóbulos blancos y células muertas que generalmente se forma cuando el cuerpo combate las infecciones. En el caso de PLA, en lugar de drenar desde el sitio de la infección, el pus se acumula en una bolsa dentro del hígado. Un absceso generalmente se acompaña de hinchazón e inflamación en el área circundante. Puede causar dolor e hinchazón en el abdomen.
Un absceso hepático piógeno puede ser fatal si no se trata de inmediato.
Causas del absceso hepático piógeno
La causa más común de PLA es la enfermedad biliar. Este es un término amplio para las condiciones en el árbol biliar que afectan el hígado, el páncreas y la vesícula biliar. Según Johns Hopkins Medicine, un conducto biliar común inflamado e infectado se asocia con hasta el 50% de los abscesos hepáticos.
Otras causas y factores de riesgo incluyen:
- bacteria de un apéndice roto que forma un absceso
- cáncer de páncreas
- cáncer de colon
- enfermedad inflamatoria intestinal, como diverticulitis o un intestino perforado
- una infección de la sangre o septicemia
- trauma al hígado por accidente o lesión
Según una investigación publicada en Clinical Infectious Diseases, las personas con diabetes mellitus tienen un riesgo 3.6 veces mayor de esta afección porque a menudo son más susceptibles a la infección.
Síntomas de absceso hepático piógeno
Los síntomas de PLA se parecen a los de inflamación de la vesícula biliar o infección masiva. Pueden incluir:
- resfriado
- vómitos
- fiebre
- dolor abdominal superior derecho
- pérdida de peso dramática repentina, como 10 libras en unas pocas semanas
- orina oscura
- heces blanquecinas o grises, de color arcilla
- Diarrea
Diagnóstico de absceso hepático piógeno
Su médico puede ordenar una combinación de hemocultivos y pruebas de imágenes para diagnosticar la afección. Se pueden usar las siguientes pruebas:
- una ecografía abdominal para localizar un absceso
- Una tomografía computarizada con contraste intravenoso, o tinte inyectado, para encontrar y medir el absceso
- Exámenes de sangre para buscar signos de inflamación infecciosa, como un aumento en el recuento de glóbulos blancos en suero y el nivel de neutrófilos
- cultivos de sangre para el crecimiento bacteriano para determinar qué antibiótico (s) necesita
- una resonancia magnética del abdomen
Un absceso hepático piógeno puede aparecer como una masa que contiene gas y líquido en el hígado cuando se observa con tomografías computarizadas.
Tratamiento del absceso hepático piógeno.
Algunas personas pueden ser tratadas con éxito para el PLA con antibióticos solos. Sin embargo, la mayoría necesita drenaje del absceso, que se considera la terapia ideal para el PLA. Esto implica insertar una aguja y posiblemente colocar un catéter de drenaje en el absceso para eliminar el pus que contiene infección. Su médico también puede realizar una biopsia de hígado al mismo tiempo tomando una muestra de su tejido hepático. Esto ayuda a su médico a determinar la salud general de su hígado. Estos procedimientos invasivos de diagnóstico e intervención se realizan con tomografía computarizada o guía de ultrasonido.
Los médicos intentan tratar el PLA sin cirugía si es posible para evitar el riesgo de que las bacterias se propaguen por el cuerpo. Sin embargo, en casos más severos, se puede requerir cirugía para eliminar completamente el material del absceso.
Después de la cirugía, recibirá tratamiento con antibióticos durante varias semanas para ayudar a eliminar por completo la infección. Según un artículo de revisión en Clinical Liver Disease, los antibióticos parenterales (intravenosos) seguidos de antibióticos orales se usan para tratar y controlar el PLA. El curso inicial de antibióticos intravenosos ayuda en el proceso de curación inicial. Varias semanas de tomar antibióticos fuertes por vía oral pueden ayudarlo a sanar después de haber tenido una buena respuesta clínica a las terapias antibióticas quirúrgicas y parenterales.
Complicaciones del absceso hepático piógeno.
La principal complicación del PLA es la sepsis, que es una infección grave que causa inflamación sistémica grave. Esto puede conducir a una caída peligrosa de la presión arterial. Si no se trata de inmediato con antibióticos y líquido intravenoso, la sepsis puede ser fatal.
El drenaje y la cirugía de PLA tienen el riesgo de propagar bacterias por todo el cuerpo. Esto puede causar infección generalizada o la formación de abscesos en otros órganos.
Las bacterias liberadas y diseminadas por todo el cuerpo pueden causar:
- embolia pulmonar séptica, que ocurre cuando una bacteria estimula un coágulo en una o más arterias en los pulmones
- absceso cerebral, que puede causar daño neurológico permanente
- endoftalmitis, que es una infección en la parte interna del ojo que puede conducir a la pérdida de visión
Perspectivas para personas con absceso hepático piógeno
El PLA puede ser mortal. Debe buscar ayuda médica de inmediato si tiene los síntomas de PLA para evitar complicaciones graves de salud. El diagnóstico oportuno y el tratamiento quirúrgico son importantes para una perspectiva positiva.