Que es la pieloplastia, para que sirve y como es la recuperación
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La pieloplastia es un procedimiento quirúrgico indicado en el caso de cambios en la conexión entre el uréter y el riñón, que pueden conducir, a largo plazo, a disfunción e insuficiencia renal. Así, este procedimiento tiene como objetivo restablecer esta conexión, evitando la aparición de complicaciones.
La pieloplastia es relativamente sencilla, solo es necesario que la persona permanezca en el hospital unos días para realizar un seguimiento, y luego es dado de alta a casa, y el tratamiento debe continuarse en casa con reposo y uso de antibióticos que indique el médico. urólogo.
Para que sirve
La pieloplastia es un procedimiento quirúrgico indicado en casos de estenosis de la unión uretero-pélvica, que corresponde a la unión del riñón con el uréter. Es decir, en esta situación se verifica el estrechamiento de esta conexión, lo que puede promover la disminución del flujo urinario y resultar en daño renal y pérdida progresiva de función. Así, la pieloplastia tiene como objetivo restablecer esta conexión, restableciendo el flujo de orina y disminuyendo el riesgo de complicaciones renales.
Así, la pieloplastia está indicada cuando la persona presenta síntomas relacionados con estenosis de la unión ureteropélvica y cambios en las pruebas de laboratorio, como niveles de urea, creatinina y aclaramiento de creatinina, y pruebas de imagen, como ecografía abdominal y tomografía computarizada.
Como esta hecho
Antes de realizar la pieloplastia, se recomienda que la persona esté en ayunas durante unas 8 horas, permitiéndose únicamente el consumo de líquidos, como agua y agua de coco. El tipo de cirugía depende de la edad y la salud general de la persona, y se puede recomendar lo siguiente:
- Cirugía abierta: donde se hace un corte en la región abdominal para corregir la conexión entre el uréter y el riñón;
- Pieloplastia por laparoscopia: este tipo de procedimiento es menos invasivo, ya que se realizan a través de 3 pequeñas incisiones en el abdomen, y promueve una recuperación más rápida de la persona.
Independientemente del tipo de cirugía, se hace un corte en la conexión entre el uréter y el riñón y luego se restaura esa conexión. Durante el procedimiento, también se coloca un catéter para drenar el riñón y reducir el riesgo de complicaciones, que luego debe ser retirado por el médico que realizó el procedimiento quirúrgico.
Recuperación de pieloplastia
Después de la pieloplastia, es común que la persona permanezca de 1 a 2 días en el hospital para recuperarse de la anestesia y verificar el desarrollo de cualquier síntoma, evitando así complicaciones. En los casos en que se haya insertado un catéter, se recomienda que la persona regrese al médico para que se lo retire.
En casa, es importante que la persona permanezca en reposo, evitando esfuerzos durante unos 30 días y beba abundantes líquidos, además de utilizar los medicamentos indicados por el médico. Por lo general, el médico recomienda el uso de antibióticos para prevenir la aparición de infecciones.
La recuperación de la pieloplastia es relativamente sencilla, y solo es necesario que pasado el período de recuperación estipulado por el médico, la persona vuelva a la consulta para que se puedan realizar exámenes de imagen para comprobar si la cirugía fue suficiente para corregir el cambio.
Si durante el período de recuperación la persona presenta fiebre alta, sangrado excesivo, dolor al orinar o vómitos, es importante que regrese al médico para una evaluación y se pueda iniciar el tratamiento más adecuado.